Dios te dará gozo en medio de las dificultades. Sí estas desesperado, no pierdas la esperanza porque Dios está contigo en tu momento difícil. La esperanza, es definida por el diccionario de la Real Academia Española, como la virtud teologal por la que se espera que Dios otorgue los bienes que ha prometido.
Ese dar siempre ha sido cumplido por Dios, así cuando estuvieron en cautiverio el pueblo hebrero en Babilonia por orden de Nabucodonosor, en el año 504 a.C., Jehová manifestó no perder la esperanza de tener su libertad a los hebreos.
Pues, 70 años después lograron su liberación para construir nuevamente el templo de Dios en Babilonia cumpliendo así Dios su palabra.
Doscientos años después, David en el libro de Los Salmos en el año 750 a.C., expresa no perder la esperanza, a pesar de estar en un tiempo agitado.
Pero, esa estadía debe ser sujetada a la palabra de Dios y tener sensibilidad con el hermano porque esa conducta en obediencia será escudo mientras llega la luz en medio de la neblina.
David, asevera lo difícil de aguantar, por eso, recomienda respirar, tener calma porque ese esfuerzo de paciencia tendrá recompensa de parte de Dios.
Ese recibir en la espera Pablo en el libro de Los Romanos, escrito en Corintios en el año 58 d.C., señala que la espera en felicidad y paciencia produce constancia.
De está manera, con esa perseverancia será el complemento de la esperanza de mejorar la situación vivida. Sin duda, Jesucristo no nos defraudará en su cometido porque él es la gloria viva en medio de las circunstancias difíciles.
De esa complicación, Pedro desde Roma en el año 64 d.C., recuerda la resurrección de Jesucristo como experiencia de vida como la esperanza de vivir. Ese renacer de Jesucristo, debe ser en respeto al corazón.
Cuando tenemos energía con nuestro criterio, vamos a desmayar, y completamente caer; pero con nuestros corazones y nuestras esperanzas en el cielo, seremos llevados por encima de todas las dificultades, y estar en condiciones de tomar posesión del premio de nuestra elevada vocación en Cristo Jesús, dice el comentario de Matthew Henry.
Por eso, es importante tener nuestra fe en Dios con confianza y firmeza que él responderá. Lo que aún es futuro con la fe de Jesucristo seguro lo obtendremos. No pierda la esperanza, ni la fe porque Dios dará lo prometido. Mantente en gozo en medio de las dificultades.
No desanimes en tú vida, lo que está ocurriendo es pasajero. Ten la esperanza con paciencia. Esté sacrificio no será en vano. Vas ver lo prometido Dios, una vida en abundancia en medio de la escasez como desea Jesucristo.