cGanamos las elecciones y con ella, una nueva etapa de la Revolución Bolivariana, seis años más para ejercer gobierno con las dificultades y obstáculos impuestos hasta hoy por poderosos sectores internos y externos, que ya han prometido seguir su política de ahogo al pueblo por haber elegido nuevamente, por vía democrática y constitucional, al presidente Nicolás Maduro, lo que de alguna manera quiere decir, que Chávez sigue en el poder.
En esta etapa revolucionaria el sacrificio no se le puede pedir al pueblo, por el contrario, el pueblo ha demostrado con gran heroísmo resistir los embates de esta guerra que pretende humillarlo quitándole los alimentos, las medicinas, los servicios, el efectivo y además, encareciendo su vida todos los días para que el sueldo no le alcance y no pueda vivir dignamente, mucho menos gozar ni disfrutar de ningún merecido placer.
En esta etapa de la Revolución, el sacrificio debe ser para la dirigencia, el alto mando político-militar y el Partido Socialista Unido de Venezuela, entre otros, que si bien es cierto han entregado su tiempo y dedicación, hoy deben hacerlo con más empeño, pero también, con la gente, en el seno del pueblo, porque en esta etapa no se vale dejar al pueblo de lado, tampoco se vale estar más en oficinas y espacios de reuniones que en la calle, en las comunidades, barrios, comunas, centros laborales, fábricas, escuelas, liceos y universidades, hay que ir a donde están los sabios que no decidieron hacer política pero que sí decidieron construir una mejor cotidianidad desde sus espacios de vida, desarrollo, estudio y trabajo.
Por otra parte, necesario es reconocer que tenemos problemas de corrupción, ineficiencia y burocratismo que debemos atacar, que el enemigo nos hace daño con estas prácticas pero más daño nos hace el amigo que las practica igual y que se escuda en las fotos de Chávez y en históricas luchas que son valiosas para su tiempo, pero que no pueden ser de útil fachada para aprovecharse o burlarse del pueblo a nombre de una Revolución que le ha costado la vida del Líder Supremo y la de miles en los últimos 20 años de historia Patria, no es justo…, es por ello que en esta etapa de la Revolución, no hay amigo que valga si sus prácticas son contrarrevolucionarias.
También es necesario destacar que los esfuerzos por levantar la economía deben ser mayores, como bien dice nuestro presidente obrero, reelecto por la mayoría del pueblo, Nicolás Maduro, debemos dejar de ser minimalistas, un crédito para apoyar al pequeño emprendedor debe ser representativo y acorde a los tiempos que vivimos, a la realidad económica que tenemos, debemos revisar la tabla de micro créditos y nos daremos cuenta que no es posible inversión alguna con ella, la Venezuela potencia debe contar con grandes inversiones y un poderoso desarrollo industrial donde pareciera faltar voluntad política, mucho más cuando vemos a un presidente que no escatima recursos cuando se trata de inversiones sociales, mucho menos de las económicas, cuando se tiene un líder que dice: “pida por esa boquita”, creo que lo único que falta es quien sepa pedir lo que se deba pedir.
Para la nueva etapa se augura cambios, una etapa de profundización y radicalización, determinante para el que duda, desafiante para el adversario, contundente para el convencido, en esta etapa la unidad revolucionaria es vital, desprenderse de las miserias y mezquindades que causa la lucha por el poder es necesario para actuar como verdaderos revolucionarios, donde el interés supremo debe ser construir nuestro Socialismo, Bolivariano, auténtico, poderoso y luminoso para otros pueblos, acá nuestro Partido debe jugar un papel fundamental, con mucha responsabilidad y sin sectarismos, cuidando lo que existe en las bases dirigentes, valorando cada cuadro y cada lucha en su justa dimensión, y engranándolas en los fines que la Patria demanda hoy.
Solo les digo a mis hermanos y hermanas de lucha, quien decidió incursionar en la política revolucionaria debe saber en qué se metió, nos casamos los problemas más grandes del mundo al desafiar a un imperio, a mafias ricachonas de la burguesía nacional e internacional, pero también a los mafiosos internos que aprovechan estos espacios para hacerse de ellos, y nos enfrentamos a los intereses que rodean cada problema que decidimos solucionar, decidimos luchar por la justicia con los riesgos que eso implica, que nadie diga que no sabía en qué se estaba metiendo.
Son muchos los problemas, retos y desafíos, pero también son muchos los planes, proyectos y fines, son mayores las expectativas de nuestro pueblo, el imperio ya marcó la pauta con nuevas sanciones, marquemos la nuestra con nuevos logros, siempre con el pueblo, por el pueblo y para el pueblo, en unidad.
Por: Edwin Velásquez
(El Bachi)