Los firmantes se comprometen a propiciar un clima de respeto, paz y participación democrática, para que en la jornada electoral del 28 de julio y los días posteriores no se desconozca la voluntad del pueblo con hechos de violencia
Nicolás Maduro, presidente de Venezuela y aspirante a la reelección, suscribió este jueves (20.06.2024) un acuerdo para reconocer los resultados ofrecidos por el Consejo Nacional Electoral (CNE) en las elecciones del 28 de julio. En total 8 candidatos sellaron este pacto, propuesto por el chavismo y oficializado por la autoridad electoral.
Además de Nicolás Maduro, Luis Eduardo Martínez, Daniel Ceballos, Benjamín Rausseo, José Brito, Antonio Ecarri, Javier Bertucci, y Claudio Fermín, ratificaron su compromiso de respetar los resultados ofrecidos por la autoridad electoral.
Edmundo González (apoyado por María Corina Machado) y Enrique Márquez, no firmaron el acuerdo.
Los candidatos firmantes se comprometen a propiciar un «clima de respeto, paz y participación democrática», para que, en la jornada electoral y los días posteriores «no se interfiera o desconozca la voluntad del pueblo de Venezuela con hechos de violencia y desestabilización que atenten contra el bienestar del país«.
Luego de la firma del documento, Nicolás Maduro dijo «acabamos de firmar este acuerdo importante para la paz de Venezuela (…) Es una firma antiguarimba, porque hay quienes les gusta utilizar los procesos electorales para preparase para la violencia, gritar fraude (…) Hoy, con esta firma les hemos dicho: No queremos violencia, queremos respeto al árbitro. Si el árbitro te convoca, estás obligado como candidato a acudir, a escuchar al árbitro (…) Venezuela siempre contará con nuestra firma, siempre estaremos cuando el árbitro nos convoque (…) si uno se inscribe en una competencia, tiene que respetar al árbitro. Es el ABC de cualquier competencia”, enfatizó.
Maduro celebró los valores democráticos del documento y llamó a todos los venezolanos a respetar a la autoridad electoral, y al texto firmado por los candidatos presidenciales. Recalcó que Venezuela quiere tranquilidad para avanzar en su recuperación social y en la construcción del futuro.
Elvis Amoroso, presidente del CNE, definió al acuerdo como un hito «histórico para garantizar la democracia venezolana y la paz en todas las instancias (…) los que están aquí son ciudadanos que han cumplido todos los requisitos para ser aspirantes a la Presidencia», además, se complació porque el cronograma se ha cumplido en un 70%.
El acuerdo establece:
1) actuar en estricto cumplimiento de la Constitución, la ley orgánica del poder electoral, la ley orgánica de procesos electorales y demás normas que rigen este proceso electoral;
2) reconocer al Poder Electoral como la única autoridad legítima y competente para la organización, administración, dirección y vigilancia de la elección presidencial del 28J;
3) reconocer que el CNE ha venido dando cumplimiento a las garantías electorales en cada fase del proceso previsto en el cronograma electoral y convalidar los resultados emitidos por el Poder Electoral respetando la voluntad popular expresada mediante el sufragio, en concordancia con lo previsto en los Acuerdos de Barbados y Caracas;
4) competir en un clima de respeto, paz, participación democrática para que en el proceso electoral del 28J y en los días posteriores no se interfiera o desconozca la voluntad del pueblo con hechos de violencia o desestabilización que atenten contra el bienestar del país;
5) solicitar a los Gobiernos del mundo el respeto a la soberanía y autodeterminación de Venezuela
6) cumplir con el deber de honrar y defender la patria, y exigir el levantamiento absoluto de las sanciones coercitivas unilaterales impuestas al pueblo venezolano;
7) los objetivos del presente acuerdo son afianzar la soberanía nacional, la estabilidad democrática, la gobernabilidad, el pleno respeto a los DD.HH., las garantías en los procesos electorales, la cooperación ante la coyuntura económica-social existente, el Estado de Derecho constitucional, el desarrollo pleno de los derechos políticos y la democracia, fomentar una política de reconocimiento como fundamento para la convivencia democrática nacional y el repudio absoluto a cualquier manifestación de violencia como instrumento político.
8) rechazar y denunciar cualquier financiamiento o recurso proveniente de hechos ilícitos, nacionales o internacionales;
9) nosotros, los candidatos, reiteramos ante todos los venezolanos y rectores del CNE, nuestra responsabilidad con la democracia y la plena sujeción al orden constitucional legalmente establecido en el país, y la voluntad absoluta de reconocer los resultados que emita el Poder Electoral.
La extrema derecha ha calificado a los candidatos opositores firmantes del acuerdo como “colaboracionistas”, mientras que su candidato, Edmundo González, justificó su negativa a firmar, argumentando que el acuerdo fue «impuesto unilateralmente» por el CNE.
El pasado viernes (21.6.24) durante un acto en Maturín, estado Monagas, el presidente Maduro alertó sobre los planes violentos de la derecha fascista amparados por intereses foráneos interesados en apoderarse de las riquezas petroleras de Venezuela.
“Si los gringos quieren petróleo: welcome (bienvenidos), pero me lo pagan al precio internacional (…) Petróleo regalado no hay ─y se preguntó─ ¿Por qué creen ustedes que no firmaron e irrespetaron al CNE? Porque ellos pretenden cantar fraude, y lanzar guarimbas y un golpe de Estado, quieren volver a dañar al país, quieren quemar gente viva. Pero lo digo desde Maturín, esta Sultana del Guarapiche, si la derecha fascista se come la luz, lo lamentarán”, les advirtió.
Desde su cuenta @NicolasMaduro alertó que al dejar de firmar el acuerdo político para respetar al CNE y los resultados del domingo 28 de julio, “los títeres de la oligarquía» pretenden «gritar fraude, traer la guarimba, la violencia y el golpe de Estado (…) por eso dejaron de firmar los dos títeres de la oligarquía”.
En torno a los próximos comicios que se realizarán en Venezuela, medios de comunicación asociados a la ultraderecha venezolana y a gobiernos aliados a los Estados Unidos, como Argentina y algunas naciones europeas, han desatado una campaña para deslegitimizar a los rectores del ente comicial. Asimismo, han pretendido promover el desconocimiento de los resultados, previendo una victoria del chavismo.
La negativa a firmar de Enrique Márquez y de Edmundo González ─el candidato preferido de la Casa Blanca─ podría enmarcarse en planes para llamar a la violencia generalizada, buscando paralizar el país y enfrentar al pueblo entre sí.