La inflación mensual de 1%, publicada por el Banco Central de Venezuela (BCV), correspondiente al mes de junio de 2024, representa la menor en los últimos años. Adicionalmente, la acumulada para el primer semestre de este año alcanzo 8,6%; contra el 109,9% de 2023. En tanto, la anualizada de junio 2023 a junio 2024 se ubicó en 51,4%, lo cual nos proyecta, de mantenerse una tendencia similar a la experimentada, una inflación para el presente año menor al 50%. Recordemos que, el proceso inflacionario se indujo a partir del Decreto de Obama de 2015 donde se declara a Venezuela, aunque usted no lo crea, como una amenaza para la seguridad de los EE. UU. En 2023, la inflación fue de 189,8% y 234,1% en 2022, luego de haberse situado en 130.060,2% en 2018.
Al control sobre la inflación, le agregamos el equilibrio alcanzado en la tasa de cambio, con variación del 1,3% durante el primer semestre del año en curso; contra el 61,17% de 2023. Asimismo, llegamos a doce trimestres consecutivos de crecimiento económico, con una proyección de 8% para este año y; un aumento paulatino en la producción de hidrocarburos y de las inversiones extranjeras en distintos sectores de la economía nacional, particularmente, en el petrolero y en los territorios de las Zonas Económicas Especiales.
Los datos expuestos, demuestran el éxito de la política económica sobre variables transversales para la actividad productiva, luego de superar, entre otros, el ataque permanente a la moneda nacional como parte del esquema implementado por EE. UU. mediante las Medidas Coercitivas Unilaterales en conjunción con el sector extremista de la derecha, que solicita incesantemente la aplicación de “sanciones” y que, hoy, contradictoriamente y con la mayor desfachatez, le pide el voto al pueblo que ha sido víctima de la guerra económica que ha promocionado.
El mejoramiento en la actividad productiva se ha logrado con la participación del pueblo organizado, del sector empresarial nacionalista y, de la articulación, visión y liderazgo del presidente Nicolas Maduro, quien es la garantía de continuidad y fortalecimiento de este proceso de recuperación económica; y de la paz nacional que las y los venezolanos anhelamos y merecemos.