El general Mohsen Rezaei, alto oficial de los Cuerpos de la Guardia Revolucionaria Islámica (CGRI), declaró este jueves que tiempos oscuros se avecinan para el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, y para el Ejército del país hebreo, en respuesta al reciente ataque no provocado de Israel.
En sus declaraciones, Rezaei reveló que Irán ha utilizado menos del 30% de sus capacidades militares en sus operaciones de represalia. «No hemos empleado nuestras capacidades terrestres y marítimas, ni herramientas relacionadas con el petróleo y el estrecho de Ormuz», detalló, subrayando que tampoco han recurrido al apoyo de sus aliados regionales.
El general iraní explicó que el incremento gradual de la intensidad de los ataques busca dar tiempo a la población civil para evacuar. «Pedimos al pueblo de Israel que huya lo antes posible», advirtió, añadiendo que el castigo contra Israel «no ha terminado y debe cumplirse».
Rezaei defendió las acciones de Irán como legítimas bajo el derecho internacional y calificó su venganza como «sagrada». «Si el enemigo no se arrepiente, las pérdidas de continuar la guerra serán inaceptables para ellos», afirmó.
Además, aseguró que las instalaciones y científicos nucleares iraníes «están intactos» y que los materiales enriquecidos han sido trasladados a «lugares seguros». Respecto a posibles ataques estadounidenses, señaló que, aunque EE.UU. podría dañar la planta nuclear de Fordo, su capacidad para reforzar a Israel es limitada.
El general reveló que Irán anticipó el conflicto desde marzo de este año, lo que les permitió multiplicar por cinco su tecnología de misiles y capacidades cibernéticas «en solo unos meses».
Previamente, los CGRI confirmaron el uso de drones y misiles contra blancos israelíes, incluyendo bases militares y centros industriales vinculados a la defensa, marcando una escalada en su estrategia de respuesta.