Se requiere una Ley protectora de animales que garantice sanciones ejemplarizantes contra el maltrato animal.
La Misión Nevado es una realidad que ha puesto de manifiesto en estos tres años, el valor de la atención integral al servicio de la calidad de vida de nuestro animales de compañía y en situación de calle.
Ha sido el punto de encuentro de proteccionistas y simpatizantes del movimiento animalista con el estado en el marco de una experiencia que sintetizó muchos de los reclamos que durante años dichas organizaciones trataron de materializar.
La Misión Nevado es el inicio de un proyecto estratégico de alcance nacional que requiere de un ordenamiento jurídico que acompañe su labor y potencie los alcances reivindicativos que desde ella se plantean para la construcción de una nueva subjetividad cultural y material que coloque a los animales como sujetos especiales de derecho.
Su inclusión dentro de una nueva constitución generarán un salto en calidad en materia de protección animal y para ello deberá tener un correlato jurídico superador de la “ley para la protección de la fauna doméstica libre y en cautiverio” que se decretara en el año 2010.
La Ley requiere de una discusión pormenorizada en la que se recoja la experiencia de la Misión Nevado, que junto a los colectivos proteccionistas dinamizan el proceso de adopción, esterilización y mejoramiento de la calidad de vida de los animales de compañía o en situación de calle.
En el artículo Artículo 34 sobre las competencias de la Unidad de gestión pública municipal se plantea: “La autoridad municipal ejercerá la competencia en materia de fauna doméstica a través de una unidad de gestión creada para tales efectos, sin menoscabo de las competencias de otros órganos y entes del Estado en esta materia”.
¿Los municipios pueden cumplir lo que expresa la Ley en sus artículos anteriores sobre la tenencia de animales?
Por ejemplo en otro artículo, específicamente en el 18, se estipula que la persona que tenga a su responsabilidad un animal doméstico debe garantizar protección en términos de su cuido, alimentación y prestación de medidas profilácticas e higiénicosanitarias como lo establecen las autoridades nacionales, estadales y municipales con relación a la materia.
Lamentablemente es común ver que existen personas con animales que no cumplen con estos preceptos mínimos para cuido de animales doméstico, lo que contribuye al maltrato.
Estos dos puntos son parte del extenso debate que hay que activar para lograr obtener una nueva Ley protectora de animales, donde se pueda garantizar sanciones ejemplarizantes contra el maltrato animal, para así lograr una mejor calidad de vida para ellos.