«Merkel quiere que los Naziz vuelvan», es este el pensar de muchos alemanes. Según una encuesta realizada por el instituto alemán de investigación de opinión Emnid, el 58% de los participantes considera que Angela Merkel es la culpable del ascenso de los partidos extremistas de ultra-derecha en Alemania. Consideran que la canciller facilitó el ascenso de partidos del nazismo, después de sus polémicas criticas sobre la crisis migratoria en Europa.
Las encuestas recientes denotan un crecimientos preocupantes entre sectores racistas y contrarios a la acogida de refugiados, evidentemente afectos a partidos como la Alternativa para Alemania (AFD), la Unión Demócrata Cristiana (CDU) y la Unión Social Cristiana de Baviera (CSU), todos vinculados con el nazismos.