Los días 4 y 5 de diciembre de 2023, se desarrolló en la Universidad Internacional de las Comunicaciones (Lauicom) el II Congreso Internacional de la Comunicación. Más de 400 delegados nacionales y 92 invitados de Argentina, México, Cuba, Estados Unidos, Inglaterra, España, Rusia, El Salvador, Honduras, Bolivia, Uruguay, Grecia y Chile participaron en rol protagónico en el evento para compartir con las cimarronas y cimarrones sentipensantes de esta universidad la manera de hacer comunicación para la liberación en un país agredido por el imperio estadounidense en su rol de actor principal del modelo civilizatorio occidental decadente.
En el cierre del evento, la rectora de Lauicom fue condecorada con una placa por parte del rector internacional Fernando Buen Abad y luego fueron bautizados los dos primeros números de la revista Toparquía y el primer libro de esta novísima casa de estudios: Contra la Doctrina Monroe: Venezuela toma la palabra escrito por profesoras y profesores de esta alma máter.
¿Cómo diseñar una estrategia comunicacional para convencer a los no convencidos? ¿Cómo persuadir a los desclasados? Fueron dos de las preguntas que el público formuló. Simón Rodríguez nos dice que persuadir no es lo mismo que seducir. Para este político caraqueño “el discurso persuasivo tiene una parte de su fuerza en los sentimientos del que oye, y el discurso convincente la tiene toda. ¿Por qué? nos preguntamos. Porque “en realidad, el que discurre no tiene más trabajo que recordar al que oye lo que sabe o lo que siente. Es muy difícil persuadir a un pueblo que no entiende el lenguaje social, y sin una iniciativa en la idea de su bienestar ¿cómo se le convencerá?” Rodríguez nos explica que: “todos saben mandar y exigir — persuadir es un talento — y solo podrá convencer el que encuentre al sujeto dispuesto a convenir en lo que sabe o siente”.
Simón Rodríguez arguye que “comunicar es hacer común, y común es lo que no pertenece a uno solo, lo que pasa de uno a otro por un medio o de un modo cualquiera. Las palabras son medios y las frases son modos de comunicar ideas. Las lenguas no difieren tanto por los medios, cuanto por los modos de comunicar”. Simón Rodríguez, en su rol de comunicador social para la liberación, propone establecer una ruptura epistemológica con la prensa hegemónica, conminándonos a cuestionar radicalmente sus métodos y sus tesis. Si no seguimos su ejemplo, la nueva comunicación, la liberadora, la emancipadora, la bolivariana, carecerá de bases propias.