El Gabinete de Seguridad de Israel aprobó en la madrugada de este viernes, un plan del primer ministro Benjamin Netanyahu para ocupar la Ciudad de Gaza, en una decisión que ha desatado fuertes condenas de grupos palestinos y alertas sobre una posible catástrofe humanitaria.
Según un comunicado oficial, las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) avanzarán sobre la ciudad, asegurando ayuda humanitaria «fuera de las zonas de combate». El plan, respaldado unánimemente, establece cinco condiciones para el fin de la guerra:
1. Desarme total de Hamás.
2. Retorno de todos los rehenes (vivos y fallecidos).
3. Desmilitarización de la Franja de Gaza.
4. Control israelí sobre la seguridad del territorio.
5. Un gobierno civil alternativo, excluyendo a Hamás y a la Autoridad Palestina (ANP).
Netanyahu afirmó que esta operación busca «derrotar definitivamente a Hamás», aunque analistas señalan que podría extenderse a toda Gaza.
Reacciones palestinas: «Crimen de guerra y exterminio»
Hamás calificó la medida como un «nuevo crimen de guerra» y acusó a Netanyahu de usar a los prisioneros como «herramienta política». Advirtió que la invasión tendrá un «alto costo» para Israel y reafirmó «el derecho a la resistencia».
La Yihad Islámica la tildó de «intensificación del exterminio contra Palestina», exigiendo a gobiernos árabes y occidentales frenar la ofensiva. Los Comités de Resistencia Palestina sostuvieron que la medida refleja la «incapacidad de Israel» tras meses de operaciones sin lograr sus objetivos.
La Presidencia Palestina responsabilizó a Israel y EE.UU., instando a la Casa Blanca a detener una invasión que «no traerá seguridad ni estabilidad».
Crisis humanitaria y cifras devastadoras
La decisión llega en medio de una hambruna crítica en Gaza, donde según fuentes locales:
– 61.258 palestinos han muerto.
– Más de 152.000 están heridos.
Organizaciones humanitarias alertan que la ocupación de la Ciudad de Gaza, con 800.000 residentes, forzaría una evacuación masiva en un territorio ya colapsado, donde 2 millones de personas sobreviven con acceso limitado a agua, alimentos y medicinas.
Próximos pasos
Mientras Israel insiste en que la operación es «necesaria para su seguridad», la comunidad internacional incrementa presiones para evitar una escalada. La ONU y la Liga Árabe convocaron reuniones de emergencia, aunque Netanyahu aseguró que «no habrá tregua hasta cumplir los objetivos».