Anabel Díaz Aché, historiadora venezolana, afirmó este jueves (12.09.24) que el fenómeno del fascismo en Venezuela “no es nuevo”, sino que ha tomado formas renovadas en el contexto actual.
Durante su ponencia en la conferencia “Guerra Cognitiva y Antifascismo” que realizó el Centro Nacional de Estudios Históricos (CNEH), la especialista afirmó que Venezuela ha sido atacada porque tiene muchas riquezas.
“Venezuela tiene lo que las potencias hegemónicas necesitan, y no solo se trata de petróleo. Se trata de borrar nuestra capacidad de resistencia y nuestra historia de lucha contra imperios”, dijo Díaz Aché.
Anabel, conocida por su trabajo en la historia social y política del país, destacó el papel crucial de las mujeres en la lucha antifascista. “En Venezuela hay más ovarios que petroleros”, añadió.
Asimismo, la catedrática subrayó cómo las mujeres han sido protagonistas en la lucha social y política del país, por enfrentar con valentía al fascismo.
“Nuestra función es la reproducción de la vida, mientras que el fascismo representa la muerte convertida en política”, agregó.
Manuel Carrero, reconocido por sus estudios sobre la historia contemporánea de Venezuela y su enfoque en la resistencia popular, hizo hincapié en cómo las élites han utilizado la guerra y el terror como herramientas para mantener el control sobre los pueblos.
“La historia nos enseña que el miedo es una herramienta poderosa, pero también lo es la unión del pueblo”, indicó.
El historiador también recordó eventos históricos significativos, como el golpe de Estado en Chile y los ataques del 11 de septiembre en Estados Unidos, para ilustrar cómo las narrativas hegemónicas buscan deslegitimar las luchas populares.
“La necropolítica es una realidad; hay millones de personas que consideran que sobran en este mundo. Sin embargo, la resistencia siempre ha encontrado formas de manifestarse”, afirmó Carrero
Ambos ponentes coincidieron en que la construcción de una memoria colectiva es fundamental para enfrentar los desafíos actuales.
“No podemos permitir que el miedo nos paralice. La historia nos ha enseñado que cuando nos unimos, somos capaces de enfrentar cualquier adversidad”, concluyó Anabel, mientras Carrero instó a los asistentes a no olvidar las lecciones del pasado.
La actividad, que se realizó en la Casa de la Historia Insurgente Bolívar-Chávez, en Caracas, culminó con un diálogo abierto entre los asistentes y los ponentes, donde se abordaron preguntas sobre el papel de la educación en la resistencia y cómo los jóvenes pueden involucrarse en la lucha por la justicia social.