Bajo la excusa de que el narcotráfico afecta su seguridad nacional en el siglo XX, Estados Unidos desplegó decenas de bases militares de nuevo tipo por Latinoamérica. La proliferación de grupos paramilitares, operaciones de contra-insurgencia, narco-Estados y aumento de la producción y el comercio ilegal de drogas son el saldo negativo de la llamada “guerra contra las drogas”.
Patricia Abreu Guillén / piag1211@gmail.com
La Administración para el Control de Drogas (DEA) es la agencia del Departamento de Justicia de Estados Unidos que comparte jurisdicción con el FBI y se dedica a la supuesta lucha contra el contrabando y el consumo de drogas en el país norteamericano.
Creada en 1973, la DEA expone en su página web que su objetivo “es hacer cumplir las leyes y reglamentos de los Estados Unidos en materia de sustancias controladas”, pero hechos concretos demuestran que la misma administración americana enmascarada desde hace más de 50 años realiza una falsa lucha antidrogas, propiciando así una cadena ilícita del narcotráfico internacional, que va desde la misma producción industrial, la dirección y manejo de las rutas de envíos.
Así lo señaló el periodista Gary Webb en su investigación denominada The Dark Alliance o La Alianza Obscura, donde devela como el mismo Departamento de Estado con sus agencias como la Agencia Central de Inteligencia (Central Intelligence Agency – CIA), El Departamento de Seguridad Interior (U.S.DepartmentofHomeland Security–US. DHS), la Agencia Federal de Investigaciones (Federal Bureau of Investigation – FBI). La Administración para el Control de Drogas (Drug Enforcement Administration – D.E.A) y la Sección de Asuntos de Narcóticos ( Narcotics Affairs Section – NAS), están ligadas íntimamente a este gran negocio internacional junto a la Banca Internacional como principal socio.
Todo esto le ha servido a Estados Unidos para financiar las actividades subversivas de la CIA en contra de otras naciones.
[embedyt] http://www.youtube.com/watch?v=CuFd8HAeKQQ[/embedyt]
Es por ello que tanto la CIA como la DEA fueron expulsados de Venezuela en el año 2005, teniendo como consecuencia que posteriormente Bolivia hiciera lo propio en el año 2008, dichas medidas fueron tomadas por los mandatarios Hugo Chávez y Evo Morales tras señalar que estas organizaciones han actuado de la mano y como ejército de apoyo en el tráfico mundial de la droga.
Fin de convenio con la DEA en Venezuela
El estado venezolano argumentó que esta acción fue en defensa de la soberanía venezolana, pues según indicó el Presidente Chávez, la DEA apoyaba el narcotráfico en Venezuela y hacía inteligencia contra su Gobierno.
“La DEA no es absolutamente necesaria para la lucha en contra del tráfico de drogas”, de esta manera el líder de la Revolución Bolivariana, Hugo Chávez, puso fin al convenio que mantenía Venezuela con la oficina de Administración Federal de Drogas (DEA), ubicada en los Estados Unidos, dicha decisión fue ratificada el 7 de agosto de 2005.
Venezuela es el único país en el continente que ha promulgado una ley para intercepción, inutilización, inmovilización y disuasión de aeronaves que sirven al tráfico internacional de drogas.
Asimismo el Ejecutivo Nacional, comprobó que había infiltrados agentes de ese organismo en asuntos internos y que ni aún las autoridades nacionales tenían acceso a los resultados de operaciones coordinadas por la DEA en el país.
Incautación de droga se duplicó
Durante estas labores de «inteligencia» de la DEA en Venezuela, no se registraron capturas de capos, ni personas vinculadas en menor o mayor medida a organizaciones internacionales del narcotráfico así como disminución en la movilización de drogas a otros países.
Venezuela es el único país en el continente que ha promulgado una ley para intercepción, inutilización, inmovilización y disuasión de aeronaves que sirven al tráfico internacional de drogas.
Sin embargo, una vez que el comandante Chávez decidió, en 2005, suspender la colaboración con la DEA, la incautación de drogas en Venezuela se duplicó así como se obtuvo un mejor control y proceso para desarticular bandas criminales, a través de la creación del Plan Nacional Antidroga.
Las autoridades de seguridad del Gobierno venezolano han logrado capturar a más de 110 personas o capos ligados al tráfico de droga y legitimación de capitales. De igual manera el Gobierno Nacional incautó un promedio de 55,7 toneladas de droga al año, para totalizar la cantidad de 557,74 toneladas de estupefacientes de distintos tipos que pretendían transitar por territorio venezolano.
Esta estadística configura un aumento del 60% en la efectividad de la incautación promedio por año, en comparación al momento en que la DEA mantenía las operaciones en el país suramericano. Entre los años 2012 y 2015 se han neutralizado 92 aeronaves producto de la aplicación eficiente del Sistema de Exploración y Vigilancia impidiendo el tránsito de 180 toneladas de droga desde territorio venezolano.
Por esta política la Organización de Naciones Unidas (ONU) realizó un reconocimiento a Venezuela, nación que se ubica entre los seis países de mayor confiscación de estupefacientes. Por lo tanto, la ruptura con la DEA no aisló a Venezuela de la lucha antidroga, pues mantiene en ese ámbito alrededor de 50 acuerdos internacionales con 37 países, donde colabora plenamente con la Comisión Interamericana para el Control del Abuso de Drogas (instancia que depende de la Organización de Estados Americanos), así como con la comisión de Estupefacientes de la ONU y la Interpol.
Evo Morales expulsó a la DEA por “conspiradora”
El 1 de noviembre de 2008 el presidente Evo Morales suspendió todas las actividades en Bolivia de la DEA acusándola de haber promovido un “golpe civil” de derecha en septiembre de ese mismo año. “A partir de hoy día se suspende de manera indefinida cualquier actividad de la DEA norteamericana”, afirmó el gobernante.
[embedyt] http://www.youtube.com/watch?v=t1s2_zHGn78[/embedyt]
«Donde está instalada la DEA y las bases militares de EE.UU. crece el narcotráfico y la delincuencia, la riqueza ilegal, los gobiernos privatizadores, las élites millonarias corruptas, serviles y funcionales al imperio», indicó Evo Morales.
“Tenemos la obligación de defender la dignidad y soberanía del pueblo boliviano”, afirmó el mandatario desde el aeropuerto de Chimoré, donde operaba un cuartel antidroga que fue financiado por EEUU en la década del 90.
Por su parte, la Agencia Antidroga de Estados Unidos (DEA) podría estar vinculada a una red de corrupción que negociaba los estupefacientes decomisados en Bolivia cuando esta institución realizaba operaciones en ese país, así lo reveló Morales.
Para Morales la falta de credibilidad es una de las causas del fracaso de la política antidroga de EE.UU. en su país y en el resto de las naciones. Asimismo, el mandatario denunció que el Gobierno estadounidense utiliza este tipo de supuestas luchas, ya sea contra el terrorismo o las drogas, para aplicar sus políticas de dominación y sometimiento ejecutado para invadir otras naciones.
Bolivia disminuyó la producción de coca
El mandatario boliviano destacó que a fin de liberar su país de la droga se nacionalizó la lucha contra el narcotráfico y se propuso un modelo digno y soberano.
En 2014, el cultivo de coca disminuyó 11% en Bolivia en comparación con los años anteriores, informó la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC). En este período, la superficie cultivada pasó de 23 mil hectáreas a 20 mil 400, la menor en doce años. Antonino de Leo, representante de la UNODC en Bolivia, señaló que estos resultados confirman una tendencia decreciente en los últimos 4 años.
¡PIÉNSALO!
¿Con qué moral EE.UU certifica a otros países si no hace ninguna acción para reducir la demanda de estupefacientes en su territorio, cuando el mayor número de consumidores está en esa nación?.