El Plan de la Patria 2025-2031
Me tomo la licencia de comentar en este espacio mi experiencia como entrevistador del presidente Nicolás Maduro, en su programa semanal Con Maduro +. Como común denominador de los temas tratados en esa interacción, destaco la mirada de largo plazo que imprime el jefe del Estado en su discurso y en sus acciones.
Comencemos con su propuesta del Plan de la Patria, que será consignada ante la Asamblea Nacional tan pronto se haga la juramentación para el nuevo período presidencial, acto previsto constitucionalmente para el 10 de enero.
El presidente manifestó su total convencimiento de que en 2025, pese a las intenciones, confabulaciones e intrigas del poder imperial y sus acólitos locales, existirá el clima político de paz y diálogo necesario para que ese plan sea discutido.
Previamente, en el segmento editorial del programa, Maduro había explicado cómo se han forjado los contenidos del nuevo Plan de la Patria, en el debate con las organizaciones populares y las fuerzas de la sociedad en general.
Un plan para los siguientes seis años es una muestra de la visión prospectiva que debe caracterizar a un proceso político como el bolivariano. Tal fue su signo durante la fragua del movimiento originario y así tiene que seguir siendo.
Medidas enérgicas para proteger a los más jóvenes
En la conversación con el presidente, surgió un tema noticioso muy preocupante: la muerte de dos niños que fueron arrastrados por uno de los llamados retos que corren por la red social TikTok. En este caso se trató del consumo no prescrito del medicamento Clonazepam. Los participantes son desafiados a consumir ese fármaco que tiene efectos directos sobre el sistema nervioso. El muy peligroso “juego” (que muy lejos está de serlo) ha causado muertes y daños serios a menores de edad en diversos países.
Maduro fue claro al respecto: anunció que había dado instrucciones al presidente del Consejo Nacional de Telecomunicaciones (Conatel), Jorge Márquez, para que se comuniqué con el representante de TikTok en Latinoamérica y le exija que se impida la viralización de este tipo de contenidos en el país. Le otorgó un plazo de 72 horas para establecer esas restricciones. En caso de no hacerlo, el gobierno venezolano tomará medidas más enérgicas.
El presidente hizo además un llamado a la conciencia general, de las madres, los padres y otros adultos de las familias; de los líderes comunales; de las y los docentes; y de las niñas, niños y adolescentes. Todas y todos deben entender la gravedad de ese tipo de desafíos, que tienen muy variadas modalidades, todas ellas muy riesgosas para la salud, la integridad física y la vida.
Repudio a los contenidos degradantes
Otro alerta lanzado por el presidente y referido a las nuevas generaciones de venezolanas y venezolanos fue su opinión en torno a la polémica generalizada sobre el tema +57 de la cantante colombiana Karol G., en cuya letra participaron otros destacados artistas de la música comercial neogranadina.
En este caso, Maduro dijo que opinaba en su calidad de abuelo, más que en la condición de presidente. Criticó severamente tanto la letra (aunque luego la hayan “suavizado”) como el video oficial del tema musical, en el que se ensalza a una adolescente de apenas 14 años que lleva una vida nocturna desenfrenada.
“No me meto como Presidente, pero tengo que hablar como abuelo, me parece una basura esa canción, tanto la letra como el video (…) No sólo promueve el consumo de drogas, sino que además desprecia y sexualiza en aspectos negativos a la mujer, afectando a niños y niñas a nivel mundial. Es un peligro que este tipo de canciones lleguen a la juventud, pues de inmediato son cantadas por los niños y niñas. A veces, niñas de 2 y 4 años de edad repiten la canción además de ese video terrible”, dijo.
La Alianza Global contra el Hambre y la Pobreza
El presidente opinó, asimismo, sobre la propuesta formalizada por su homólogo brasileño, Luiz Inácio Lula Da Silva en la Cumbre del G-20, en Río de Janeiro, orientada a establecer una Alianza Global contra el Hambre y la Pobreza.
La idea es concentrar recursos y conocimientos para desarrollar políticas públicas y tecnologías sociales comprobadas para la reducción del hambre y la pobreza en todo el planeta.
Se trata de una iniciativa de Lula que ya viene avanzando y cuenta con el apoyo de más de 80 países, organismos internacionales y organizaciones no gubernamentales.
Maduro anunció que Venezuela se suma a la propuesta y está en condiciones de hacer aportes concretos en materia de políticas exitosas de apoyo a los sectores más vulnerables. Entre ellas mencionó los Comités Locales de Abastecimiento y Producción (CLAP) que mitigaron los efectos letales del bloqueo y las medidas coercitivas unilaterales y pueden servir de modelo para otros países, sobre todo porque se apoyan en la organización y la labor colaborativa de las comunidades.
El presidente mostró su magnanimidad y espíritu diplomático al elogiar el discurso de Lula en el G-20, cuando aún está abierta la herida que dejó el veto de Brasil al ingreso de Venezuela a los BRICS. Demostró, también en este aspecto, que está pensando con la mirada en el largo plazo.