El expresidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, presentó este viernes 08 de junio su candidatura para las próximas elecciones presidenciales liderando la intención de voto con un 39% de acuerdo a un reciente estudio del Instituto Vox Populi. Y aseguró que llevará su postulación «hasta las últimas consecuencias», en un mensaje leído por su sucesora Dilma Rousseff durante el lanzamiento de la precandidatura realizado en el estado de Minas Gerais, sureste de Brasil.
“Sé que mi candidatura representa la esperanza y la vamos a llevar hasta las últimas consecuencias porque tenemos a nuestro lado a la fuerza del pueblo”, afirmó el candidato del PT.
El lanzamiento de la candidatura se realizó un día después de que Lula cumpliera dos meses en prisión política en la Superintendencia de la Policía Federal, en Curitiba.
Lula da Silva ofrece acabar con el sufrimiento del pueblo brasileño, reconstruir el país y volver a soñar con una gran nación.
“Eso es lo que me anima a seguir luchando”, subrayó el fundador y líder histórico del Partido de los Trabajadores (PT) en el manifiesto dado a conocer a propósito de su candidatura.
En el extenso documento, Lula dice asumir esa misión “porque tengo una gran responsabilidad con Brasil y porque los brasileños tienen el derecho de votar libremente por un proyecto de país más solidario, más justo y soberano; perseverando en el proyecto de integración latinoamericana”.
Señala también que en su prolongada carrera política tuvo muchas candidaturas, pero considera que ésta es diferente: “es el compromiso de su vida”.
Afirma que quien tuvo el privilegio de ver a Brasil avanzar en beneficio de los más pobres, después de siglos de exclusión y abandono, “no puede omitirse en la hora más difícil para nuestra gente”.
“Tenemos el derecho de soñar nuevamente después de la pesadilla que nos fue impuesta por el golpe de 2016 (contra la presidenta Dilma Rousseff)”, manifiesta y ratifica su deseo de regresar a la Presidencia de la República para demostrar, una vez más, que es posible construir un Brasil mejor para el pueblo.
El ex dignatario alude también a los dos meses de injusto encierro como preso político, que le ha impedido recorrer el país “llevando un mensaje de esperanza en un Brasil mejor y más justo, con oportunidades para todos, como siempre hice en 45 años de vida pública”.
En la carta, en la que el exmandatario de 72 años ratifica su inocencia, Lula dice que “cuando quedó claro que me detendrían a la fuerza, sin crimen ni pruebas, decidí quedarme en Brasil para enfrentar a mis verdugos. Sé cual es mi lugar en la historia y sé cual es el lugar reservado para quienes hoy me persiguen”.
“No tengo duda de que me pusieron aquí para impedirme convivir con mi gran familia: el pueblo brasileño, subraya luego de denunciar que quienes lo acusaron mintieron y los que lo condenaron armaron una farsa judicial para prenderlo sin presentar una sola prueba de su presunta culpabilidad”.
Apunta también que siempre fue tratado como un enemigo por los fiscales de Lava Jato, el juez Sergio Moro y el tribunal de apelaciones de Porto Alegre, y que contra todas esas injusticias tiene el derecho constitucional de recurrir (a las instancias superiores de la justicia) en libertad, “pero ese derecho también me es negado”.
“Por eso me considero un preso político en mi país”, explica Lula y manifiesta que aún así tiene la convicción de que la justicia hará prevalecer la verdad.
En su carta, finalmente expresa que desde donde se encuentra puede asegurar que continuará trabajando para transformar los sueños en realidad. “El camino para lograrlo pasa por la realización de elecciones libres y democráticas, con participación de todas las fuerzas políticas y sin reglas de excepción para impedir que participe determinado candidato”.
Lula, nuestro único candidato
Dirigentes del PT y de movimientos sociales y sindicales manifestaron su apoyo al exmandatario ratificando el apoyo a su candidatura.
“El único candidato que vamos a apoyar en la Central Única de Trabajadores (CUT), vamos a hacer campaña para sacar de la cárcel y para llevar al Planalto, es Luiz Inácio Lula da Silva», dijo Vagner Freitas, presidente de la central sindical.
Freitas considera necesario calentar más las calles», por lo que evalúan realizar una paralización nacional durante la primera semana de agosto.
Guilherme Boulos, precandidato del Partido Socialismo y Libertad (Psol), el mismo de la concejal asesinada en marzo, Marielle Franco, envió un mensaje leído a la audiencia en el que decía lamentar no estar presente y reivindicar la “lucha” por la liberación de Lula.
“Lula es un preso político, su libertad es una causa de todos nosotros (…) Defender su derecho a ser candidato a la Presidencia es una causa democrática”, dijo.
Lidera las encuestas
En un escenario estimulado (cuando a los entrevistados se les ofrecen los nombres de los aspirantes), Lula consiguió 27 puntos de ventaja sobre el segundo colocado, el precandidato de la extrema derecha Jair Bolsonaro (Partido Social Liberal), quien obtendría el respaldo de solo un 12% de los electores.
Mientras, en la intención de voto espontánea Lula también aventajó con holgura a los demás contendientes, con un 34% de los votos, en tanto Bolsonaro alcanza apenas un 10%.
Fundador y líder histórico del Partido de los Trabajadores (PT), Lula fue condenado sin pruebas a 12 años y un mes de cárcel en un proceso que sus abogados consideran plagado de ilegalidades y con un claro propósito político: excluirlo de la contienda en las urnas prevista para octubre próximo.
El ex dignatario fue preso el 7 de abril último, después que el tribunal de apelaciones de Porto Alegre dispusiera la ejecución anticipada de la pena -aún sin agotar los recursos en todas las instancias judiciales, como establece la Constitución- y el juez federal Sergio Moro ordenara su inmediato arresto.