El 14 de mayo de 2025 quedará grabado en la historia como un día de alegría, dignidad y justicia para el pueblo venezolano.
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Gracias a las acciones del Gobierno Bolivariano dirigido por el presidente Nicolás Maduro, junto al pueblo Venezolano, en un ambiente de paz y de profunda alegría la niña Maikelys Espinoza regresa a su Patria.
Recordemos que fue separada de su madre en el momento en que ella iniciaba un vuelo de repatriación a Venezuela, y como tantas violaciones de los derechos de nuestros migrantes y en contravención de las normas internacionales.
A finales de abril, su mamá fue deportada a Venezuela, luego de haber sido engañada por las autoridades estadounidenses, Yorely Bernal, de 20 años, había ingresado a Estados Unidos con su pareja, Maiker Espinoza, y su hijo en mayo de 2024, mientras el presidente Joe Biden aún estaba en el cargo.
Según los familiares de la pareja, las autoridades les dijeron que sus tatuajes parecían sospechosos, los detuvieron y enviaron a la niña a un hogar de acogida.
Durante el primer gobierno de Trump, las separaciones familiares en la frontera generaron indignación y demandas legales, y finalmente dejaron de utilizarse como política general.
Sin embargo, las separaciones continuaron ocurriendo en casos limitados durante el gobierno de Biden, cuando las autoridades consideraron que existía una amenaza para el niño.
Una vez más, la Revolución Bolivariana demuestra que solo los hijos de Chávez son garantía de la paz y la suprema felicidad de nuestro país.
