Venezuela, indudablemente se ha convertido en un país que, gracias a la autodeterminación del pueblo, ha sido capaz de sobreponerse ante las diversas «coyunturas» que se han propiciado a lo largo de las décadas. Ciertamente, desde la llegada de la Revolución Bolivariana, es un secreto a voces el ataque permanente contra nuestro elemento histórico; a fin de instaurar una agenda desestabilizadora en el territorio.
Como fieles soldados, nos ha tocado la tarea diaria de reinventarnos con ideas que verdaderamente garanticen estabilidad y protección a nuestro pueblo.
II
Dentro y fuera de nuestra tierra, distintas personas señalan y hasta cuestionan lo que el presidente Nicolás Maduro, y su equipo de gobierno desplegado a lo largo y ancho del país realizamos; a fin de subsistir y defender nuestro patrimonio en pie de lucha ante cualquier escenario.
Tal vez muchos se preguntarán ¿La situación en Venezuela jamás va a cambiar? Y lo que realmente desconocen o la conciencia no les permite ver, es el carácter aguerrido que se ha asumido para defender el legado que una vez el comandante Hugo Chávez sembró; y como guerreros seguimos batallando para que los proyectos de la Revolución Bolivariana evolucionen constantemente en medio de las tinieblas.
En las venas de este pueblo heroico corre la sangre de cada prócer independentista, la de nuestro libertador Simón Bolívar que nos mantiene firmes y capaces de continuar ejerciendo nuestra labor; para construir la «Patria Buena» que siempre soñó el líder revolucionario.
III
Aplaudo a los pueblos del mundo que valoran esta lucha donde afrontamos sanciones, bloqueos criminales, agendas de ataque, que sólo tienen un norte; y es, desestabilizar a las Naciones.
A nuestros hermanos y hermanas, les invito a que de forma disciplinada sigamos multiplicando esfuerzos y la unión que nos caracteriza; con el propósito de fortalecer el mundo multipolar que proyecte la paz y solidaridad, que nos permita superar los diferentes golpes de aquellos adversos al patriotismo, que hoy les molestan las grandezas de nuestra tierra, y el constante empeño por reforzar el sentir bolivariano.
Han sido efímeras, las promesas de grupos que han pretendido aplicar su sistema neoliberal, que han buscado aprovecharse de la «guerra económica» que nos afecta para arrancarle las riquezas a Venezuela. Pero esta vez, en medio de tantos hechos, el pueblo lleno de mujeres y hombres nuevos sigue despertando para defender, en cuerpo y alma, lo que con empeño hemos logrado rescatar e impulsar por nuestro bienestar.
¡Nosotros Venceremos!
Por: Christopher Constant