Armando Carías
“En las redes sociales algunas personas dicen que son buenas y resulta que son malas. Eso hay que denunciarlo”.
Andrés tiene once años y estudia sexto grado en la Escuela Experimental Venezuela, en donde “Comunicalle” estrenó la semana pasada “Mosca con la Red”, en la que se exponen los riesgos que niñas y niños pueden correr en la red.
La propuesta de escribir un texto dramático y representarlo en las escuelas, nos la hizo llegar la Superintendencia de Servicios de Certificación Electrónica (Suscerte), en marzo de este año, para lo cual nos dictó un taller sobre las diversas modalidades delictivas que personas inescrupulosas ejecutan en las redes sociales, y que tienen como blanco de sus fechorías a la niñez.
“Cuando me llega una solicitud de amistad de alguien que no conozco, acudo a mi mamá o bloqueo a la persona”, expone Juan, de doce años, en el conversatorio posterior a la representación, y añade: “Me encantó la obra. Es aleccionadora”.
La acción comunicacional consta de tres escenas, en las que se muestran los delitos más comunes que en contra la infancia se cometen en la red: groming, cyberg bulling, sexting y acceso a la privacidad de datos.
La primera escena muestra a Carola, una niña que es manipulada por un adulto que, mostrando una identidad falsa, se hace pasar por niño. La segunda expone el caso de Natacha, quien cae en la trampa de enviarle una foto a un desconocido, quien luego la expone a la burla pública, la tercera escena presenta a Sabino, un niño que ingenuamente comparte información personal en su computadora, sin tomar las debidas previsiones para protegerse.
Amanda, de once años, también cursante del sexto grado, afirmó al término de la función que cuando eso sucede “hay que denunciarlo, para que esas cosas no sigan pasando”.
Precisamente de eso le hablamos a las y los cursantes de sexto grado de la Escuela Experimental Venezuela, pues, como bien expresa uno de los personajes de la obra: “en la red hay muchas personas buenas…..pero también mucha gente mala”.
En Comunicalle ponemos a la orden de instituciones vinculadas con la infancia esta pieza, cuyo mensaje merece ser socializado, tanto con niños y niñas, como entre los adultos de su entorno.
Cuatro F 148 (PDF)