Las comunidades se preparan para la toma de posesión de Nicolás Maduro con fuerza, optimismo, con mucha alegría y en paz
El capitán Diosdado Cabello dijo, en vísperas de las elecciones de jueces y jueces de paz, que tuvieron lugar el día 15 de diciembre de 2024: “Aquí nosotros tenemos fe ciega en nuestro pueblo. Allá aquellos países que hablan de democracia pero no escuchan al pueblo (…) Nos estamos preparando para el 10 de enero”. Y el pueblo respondió participando masivamente en este hecho inédito, que profundiza la democracia participativa y directa y que felizmente ha coincidido con la conmemoración de los 25 años de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela: la elección de 15.000 jueces y juezas de paz comunales en todo el país. También se ha elegido a igual número de jueces suplentes, de entre los 52.288 candidatos inscritos para participar en la jornada comicial en 5.297 circuitos comunales conformados por comunas, consejos comunales y movimientos sociales.
Venezuela ha dado un paso más en la construcción de la Democracia Participativa y Protagónica, que prevé dar cada vez mayor espacio y autonomía a las comunidades organizadas, con miras a construir un nuevo Estado, basado en las comunas.
Cada circuito ha elegido hasta un máximo de tres jueces de paz con sus respectivos suplentes.
Un proceso -dijo el presidente Maduro el 20 de noviembre, cuando el Parlamento sancionó la reforma parcial de la Ley Orgánica de Justicia de Paz Comunal como parte del paquete de leyes del poder popular- para llevar la justicia más cerca de los ciudadanos, quienes sin necesidad de acudir a tribunales, podrán plantear los conflictos de las comunidades a un juez de paz; para que los solucione a través de la mediación y la conciliación. Conflictos relacionados con violencia familiar o de género, protección de animales, o de propiedades, que se podrían convertir en dramas más serios.
Escuchamos la voz de Joan Manuel Espidel Meza, abogado electo como suplente por el circuito 2 del casco nuevo, municipio Chacao del estado Miranda.
-La oposición venezolana dice que el gobierno quiere convertir a los cuadros políticos del PSUV en jueces de paz. ¿Ud. realiza alguna tarea política?
-Mi tarea actual no es a nivel político. La Ley Orgánica de Justicia de Paz Comunal tiene, como requisito, no pertenecer a ningun partido político ni ejercer cargos directivos partidistas. Sin embargo, mi tarea como abogado es la de ejercer con pasión el derecho de equidad, la mediación y la resolución de conflictos en la comunidad, con el fin de garantizar la pacificación del territorio.
-¿Cómo analiza este nuevo proceso electoral?
-La elección de un juez de paz, en este proceso electoral es para garantizar la justicia a nivel comunitario. Esta figura legal, cercana a los ciudadanos, desempeña un papel crucial en la resolución de conflictos menores y en la aplicación de la ley en el ámbito local.
-¿Qué importancia tiene esta elección?
-Favorece la participación ciudadana: permite a los miembros de la comunidad elegir directamente a quien los representará en la impartición de justicia, fomentando así la democracia participativa. Un juez elegido democráticamente cuenta con mayor legitimidad ante la comunidad, lo que facilita la aceptación de sus decisiones. Los jueces de paz, al ser elegidos localmente, conocen mejor las particularidades de su comunidad y pueden aplicar la justicia de manera más equitativa y adaptada a las realidades locales. Contribuye a la resolución pacífica de conflictos menores, evitando que escalen y sobrecarguen los sistemas judiciales superiores. Facilita el acceso a la justicia para aquellos que no pueden o no desean acudir a tribunales más formales.
-¿Cómo se desarrolló el proceso electoral y cuál va a ser el impacto en las comunidades?
-El proceso de elección de las Juezas y Jueces de Paz Comunal se rige por los principios de protagonismo popular, democracia participativa, corresponsabilidad, responsabilidad, conciencia del deber social, convivencia solidaria, igualdad social y de género, siendo un hecho histórico. El impacto en las comunidades va a ser relevante y positivo ya que la resolución de conflictos se hará en base a la imparcialidad y conocimiento dentro de las comunidades, en vías de seguir en la política de pacificación y protección de la familia.
-¿Cómo se inserta eso en la construcción del nuevo Estado y cuáles son las dificultades que se encuentran?
-El modelo comunal consagrado en la nueva Ley Orgánica de los Consejos Comunales está definido como un nuevo modelo de gobierno que ya no es solo nacional, local, ni siquiera municipal; sino que integra el gobierno comunal y contiene la Ley Orgánica de Justicia de Paz Comunal, integrando la justicia con el poder popular, que da inicio a la justicia social directa de la mano con la comunidad, de cada parroquia, territorio y circuito.
-¿Cómo se han vivido, en las comunidades, los ataques de la derecha desde el 28-J ?
-La derecha se vio envuelta en un conato de disturbios alterando la paz y el orden de convivencia; generando violencia tanto patrimonial como violencia psicológica por parte de líderes fascistas. Ajenos a las comunidades e incitando al odio, orquestado por el imperio, entre la población; actuando en contumacia contra el ordenamiento jurídico venezolano, y desconociendo las instituciones del Estado.
-¿Cómo se preparan las comunidades para la toma de posesión de Nicolás Maduro frente a las amenazas de la extrema derecha?
-Las comunidades se preparan para la toma de posesión de Nicolás maduro con fuerza, optimismo, con mucha alegría y en paz. Frente a las amenazas de la extrema derecha, nervios de acero, con tranquilidad, y como decía nuestro comandante Chávez, “águila no caza moscas”, pero sí prevenidas y en alerta, aunque siempre en el marco de la Constitución de la Republica Bolivariana de Venezuela.