Por Jonny Hidalgo
La hegemonía del petróleo es un fenómeno reciente, apenas del siglo pasado. En la década de 1970, se planteaba la posibilidad de sustituir al petróleo; 20 años después esto no se consideraba posible. Lo cierto es que el orden económico mundial actual no puede subsistir sin petróleo; eso no significa que no podamos vivir sin él. El problema radica en el estilo de vida y de desarrollo de nuestra civilización.
Nótese que la población rural tradicional se dispersa en el espacio y esto le permite aprovechar formas de energía también dispersas como el viento o la radiación solar. Además, consume lo que produce; por lo que no depende del mercado para adquirir lo que necesita.
En contraste, la población urbana se concentra en el espacio, en ciudades cada vez más pobladas, por lo que no le es suficiente aprovechar energías dispersas como la solar, sino que necesita formas de energía cuyo desarrollo requieran poco espacio. Así, las fuentes energéticas aprovechables son los hidrocarburos y la electricidad generada en grandes centrales hidroeléctricas, nucleares o térmicas. Por otra parte, la población urbana no consume lo que produce localmente, por lo que depende del mercado que transporta los bienes que requiere desde lugares remotos. Así, esta población es muy dependiente de los sistemas de transporte. Los derivados del petróleo mueven a las embarcaciones que por mar transportan el 90% de las mercancías del mundo. Según datos de la OPEP, el sector transporte consume el 54,6% del petróleo que se produce en el planeta, y se espera que para el 2040 consuma el 64,9%. Para la AIE, el sector transporte ya consume el 64,7%.
Para poder sustituir el petróleo, es necesario que la civilización dependa menos del mercado capitalista y para ello debe consumir lo que produzca localmente. Esto implica un retroceso cultural para aquellos que aspiran a un desarrollo humano basado en la tecnología o en la mutación genética; pero un avance significativo para quienes aspiran a la salvación de la especie humana.
No es posible sustituir al petróleo en el capitalismo. Solo con un nuevo estilo de vida podría sustituirse; lo que será cada vez más difícil, pues se promueve la falsa idea de que las culturas ancestrales o la forma de vida rural son atrasadas, fomentándose la urbanización y la industrialización. Al cierre del año 2006, la población mundial rural era menor que la urbana y se espera que para el año 2050 sea solo el 34% del total. O la especie decide el cambio o este será sobrevenido.