En Democracia
Juan Bosch, escritor, cuentista, ensayista y novelista dominicano, fue el primer Presidente elegido democráticamente en República Dominicana, tras 31 años de la dictadura de Rafael Trujillo. Pese la campaña sucia por parte de la Iglesia y de los sectores conservadores, que lo acusaron de ser comunista, obtuvo el 70% de los votos en diciembre de 1962, para tomar posesión de la presidencia, el 27 de febrero de 1963.
Apenas llegó a la silla presidencial, avanzó en una profunda reestructuración del país, la cual inició con la promulgación de una nueva Constitución que refrendó el estado de derecho y justicia social para el pueblo dominicano. La carta magna incluyó los derechos laborales, la libertad sindical, salarios equitativos y la participación de los obreros en los beneficios de las empresas donde laboraban. Igualmente, promovía la Reforma Agraria, la prohibición de latifundios y de propiedad extranjera en el país; así como el reconocimiento a la mujer, la niñez, la familia y la educación como base fundamental para el desarrollo integral. A su vez, implementó medidas para la recaudación de impuestos y el control de precios.
Todos estos cambios fueron recibidos entusiastamente por la gran mayoría humilde, quienes recibían directamente del profesor Bosch, con gran pedagogía y lenguaje sencillo, por transmisión radial, distintas reflexiones y los avances en ejecución para construir un país más justo y de iguales. La radio fue una vía importante para comunicarse con el pueblo, en su opinión: “la misión y el uso de los medios de comunicación es fundamentalmente instruir, educar y formar a la población”.
Sin embargo, el rumbo democrático que por fin parecía tomar el país, no fue bien recibido por la oligarquía nacional e internacional, la cual reforzó la campaña de descrédito contra Bosch, y con el apoyo del gobierno estadounidense, presidido por John F. Kennedy, organizó un golpe de Estado que se consumó en apenas siete meses.
El golpe de Estado
Acusado de comunista, Juan Bosch, es hecho preso en el Palacio Nacional y sacado del país. Además de líderes de facto de la Fuerzas Armadas se encontraba en la detención, el Coronel norteamericano Fritz Long, asesor de Defensa de la Embajada de los Estados Unidos. Una Junta Militar asumió el control político del país y a través de un manifiesto, disolvieron las cámaras legislativas, suprimieron la Constitución y los actos emanados de la misma. Días después una Junta conformada por civiles fue juramentada. Vale destacar que el golpe de Estado fue antecedido por una huelga general organizada por los empresarios.
Como consecuencia inmediata, se conformó la denominada guerrilla de 1963, que abogó por el restablecimiento de constitucional; y posteriormente la Guerra de Abril de 1965. Ese año, Estados Unidos, liderado por Lyndon Johnson, ocupó militarmente República Dominicana mediante la operación denominada Power Pack, para “evitar el surgimiento de una segunda Cuba”.
El profe Bosch
Juan Emilio Bosch Gavino nació el 30 de junio de 1909 en Concepción de la Vega, República Dominicana. Ya a los nueve años tecleaba sus primeras narraciones en una vieja máquina de escribir y a los dieciséis años publicó sus primeros poemas y relatos. Entre cuento y cuento se hizo escritor y desarrolló incluso una teoría sobre el cuento.
Solía decir que los cuentos se “los proporcionaba el pueblo dominicano”. Insistía igualmente que no era él quien escogía a los personajes de sus cuentos, sino que los personajes lo escogían a él como escritor de sus vidas.
Sobre el oficio de escribir señaló: “No creo que literatura puede cambiar el mundo, pero creo que la literatura como toda actividad humana, contribuye a iluminar la mente de los hombres, y que puede embellecer, enriquecer mucho la vida del hombre. De igual modo, como político y luchador consideró que “La literatura no puede escapar de ninguna manera a la realidad social, económica, política, cultural, de los seres humanos”.
Fue catedrático en distintas universidades en Estados Unidos, España, Puerto Rico y en República Dominicana. Incluso dictó conferencias en Venezuela. Fue también líder del movimiento antitrujillista y fundador de dos de los principales partidos políticos dominicanos: el Partido Revolucionario Dominicano (PRD) en 1939 y el Partido de la Liberación Dominicana (PLD) en 1973. El 1 de noviembre de 2001, hace quince años, falleció a los noventa y dos años de edad.
Bosch es considerado “un imbatible referente moral y político de la sociedad dominicana, así como gloria nacional, formador político por antonomasia y humanista de sensibilidad y convicciones firmes”. Se le reconoce a su vez, como uno de los cuentistas más destacados de Latinoamérica, junto a Quiroga y a García Márquez.
Antiimperialista
“Hay algo que los norteamericanos no han aprendido en siglo y medio de relaciones con nuestros países, y desde luego no lo aprenderán jamás, porque si este mundo ha visto un pueblo duro para adquirir conocimientos humanos –no científicos–, ese pueblo es el de los Estados Unidos. Allí pululan los técnicos en relaciones públicas, pero no hay entre ellos, dos que se hayan dado cuenta de que la América Latina es, un término de sensibilidad, una unidad viva”
Carta al pueblo dominicano después del golpe de estado de 1963
Al Pueblo Dominicano:
Ni vivos ni muertos, ni en el poder ni en la calle se logrará de nosotros que cambiemos nuestra conducta. Nos hemos opuesto y nos opondremos siempre a los privilegios, al robo, a la persecución, a la tortura.
Creemos en la libertad, en la dignidad y en el derecho del pueblo dominicano a vivir y a desarrollar su democracia con libertades humanas pero también con justicia social.
En siete meses de gobierno no hemos derramado una gota de sangre ni hemos ordenado una tortura ni hemos aceptado que un centavo del pueblo fuera a parar a manos de ladrones.
Hemos permitido toda clase de libertades y hemos tolerado toda clase de insultos, porque la democracia debe ser tolerante; pero no hemos tolerado persecuciones ni crímenes ni torturas ni huelgas ilegales ni robos porque la democracia respeta al ser humano y exige que se respete el orden público y demanda honestidad.
Los hombres pueden caer, pero los principios no. Nosotros podemos caer, pero el pueblo no debe permitir que caiga la dignidad democrática.
La democracia es un bien del pueblo y a él le toca defenderla. Mientras tanto, aquí estamos, dispuestos a seguir la voluntad del pueblo.Juan Bosch.