En sus primeros 100 días de gestión el rector de la Unearte (Universidad Nacional Experimental de las Artes), Alí Rojas Olaya, ha dado pasos para incorporar en la enseñanza los ideales de Simón Rodríguez y José Martí. Por este motivo los núcleos, llamados Centros de Estudio y Creación Artística (CECA), ahora se llaman Centros Rodriguianos de Emancipación Artística (CREA) y cada uno tiene un nombre.
El de plaza Morelos se llama ahora Aquiles Nazoa, el de Caño Amarillo se sigue llamando Armando Reverón, el de Sartenejas, en Miranda, lleva el nombre de la compositora margariteña Modesta Bor, el de Mérida se llama Las Heroínas, en homenaje al rol de las mujeres en las luchas independentistas; el de Nueva Esparta se llama Santiago Mariño; el de Portuguesa se llama Argimiro Gabaldón y el de Portuguesa lleva el nombre del cultor kariña Candelario Aray.
“No es un simple cambio de acrónimos. Es toda una concepción donde estamos diciendo que la Unearte va a convertirse en la universidad popular y productiva, como bien lo señalan los lineamientos del Ministerio del Poder Popular para la Educación Universitaria Ciencia y Tecnología”, señaló Rojas Olaya.
Plan Bárbaro Rivas
Igualmente, fue creado el Plan Bárbaro Rivas, concebido como “un acto de justicia” para otorgar títulos académicos a maestras y maestros de la Unearte. “Tenemos muchos profesores mal ubicados en el escalafón, porque les piden una cantidad de requisitos” que siguen una lógica propia de otras disciplinas académicas y no se corresponden con la calificación de la experiencia y el conocimiento en el ámbito artístico. “Es como pedirle a Picasso una tesis doctoral y que él presente el Guernica”, que no da cuenta del mérito académico, no sigue la metodología de un trabajo monográfico, pero si de la investigación desarrollada y la maestría del artista”.
Explicó que durante el último Consejo Directivo de la Unearte se decidió la creación de un comité especial que designará en cada disciplina artística a una comisión de especialistas que evaluará la obra de las maestras y los maestros que tengan una reconocida trayectoria, para luego decidir si son merecedoras o merecedores del los títulos de técnico superior universitario, licenciatura o especialización.
Una de las tareas que ya está desarrollando el comité es el diseño y evaluación de la metodología más adecuada para desarrollar la evaluación que aplicarán las comisión en cada caso.
Y para aquellos que no tengan título de bachiller se realizará el enlace con la Misión Ribas para solventar esta situación.
El objetivo es entregar los títulos el 1 de mayo de 2018, Día de la Obrera y del Obrero o el día 6 del mismo mes, cuando la Unearte alcance su décimo aniversario.
Igualmente, se iniciará un proceso para la evaluación académica que permita ubicar a las maestras y los maestros, ahora con sus respectivos títulos, en el escalafón que corresponda a sus verdaderas posiciones o rangos como docentes.
Universidad ampliada e inclusiva
El rector de la Unearte manifestó la intención de crear nuevos planes nacionales de formación en disciplinas ligadas al ámbito artístico, por lo que tiene previsto trabajar en un diseño curricular en gastronomía “que reivindique el arte popular venezolano”.
Igualmente se trabaja en el diseño curricular para las carreras de Letras y Comunicación Social y en otro plan nacional de formación en arquitectura.
Recordó que cuando el presidente Hugo Chávez oficializó la creación de Unearte pidió que ese pueblo que habita en San Agustín del Sur, como en Hornos de Cal, La Charneca, se le abran las puertas para que se forme en los salones de esta casa de estudios superiores.
Pero “este sueño de Hugo Chávez aún no se ha cumplido”, por lo que el rector propone hacer reuniones con las comunidades, comunas, nuevos urbanismos y consejos comunales cercanos a cada una de sus sedes para realizar, en principio, un censo, con el propósito de ofrecer luego, previa evaluación, una cantidad de cupos.
En caso de que se superen las expectativas con respecto a la matrícula, el rector contempló la posibilidad de establecer alianzas con las propias comunidades para buscar espacios donde se puedan dar clases.
En este afán de expandir la labor de esta casa de estudios se estableció un acuerdo con la gobernación de Cojedes por medio del cual se instalará una nueva sede de Unearte en esta entidad.
“Han venido de Barlovento porque quieren tener una sede y hemos articulado con ellos. Y hay convenio con el Banco Central de Venezuela para dar formación en el estado Bolívar en orfebrería y joyería en el Arco Minero, esa es una reunión que tendremos pronto. También hay posibilidad de crear otra sede en el Zulia”.